Análisis de las bodegas argentinas
Establecimientos vitivinícolas: perfil exportador Vs. perfil mercado interno
7 octubre, 2014
Cómo es la relación de las bodegas en la Argentina según el destino que le dan a la mayoría de su producción y cómo ese perfil varía según el tamaño de las empresas y la ubicación geográfica de las mismas.
Las estadísticas hablan de una Argentina que históricamente se ha inclinado a su fuerte y voluminoso mercado interno. Si bien los distintos ciclos de la vitivinicultura han hecho variar el volumen que representa este mercado, así como su composición, su preponderancia nunca ha sido puesta en duda.
Distintos factores de cambio acarrearon situaciones de sobre stocks estructurales (la oferta excede la demanda de manera constante), lo cual provocó durante la década de los 90 un proceso de reconversión, tanto en el parque varietal, en lo tecnológico, en el número de actores, en el origen de las inversiones, etc. Un cambio fundamental que se produjo fue la apertura hacia mercados externos, ya que hasta entonces las exportaciones eran solo marginales.
Las exportaciones han llegado, en 2013, a quitarles el 21% del mercado a los domésticos (según datos del INV 2013).
En el presente informe intentaremos cuantificar cómo se encuentra en la actualidad la relación entre empresas cuya actividad principal es el mercado interno y las que priorizan el mercado externo.
Para ello, y a efectos de minimizar las estimaciones artificiosas, usamos como indicador el volumen comercializado por cada establecimiento vitivinícola del país[1], y asignamos "perfil mercado interno" (o, como sinónimo, usaremos "perfil doméstico") a quienes destinen una mayoría simple de su volumen a venderlo en dicho mercado, mientras que "perfil exportador" aplica a quienes cumplen lo mismo pero hacia el mercado externo. Excluimos del análisis a las bodegas trasladistas, considerando que pertenecen a un eslabón de mercado donde actúan como oferentes de las mismas bodegas que comercializan el vino a destino final.
Adicionalmente, clasificamos los establecimientos por tamaño[2], según el siguiente criterio:
En el total país, contabilizamos 719 establecimientos, de los cuales 447, es decir el 62%, corresponden a empresas con perfil mercado interno, mientras que 272 reflejan perfil exportador.
Como sucede con habitualidad en las estadísticas, Mendoza es quien influye fuertemente en los totales, y esto se evidencia en que su estructura "mercado interno Vs mercado externo" es claramente diferente al resto de las provincias.
Mendoza
De los 568 establecimientos registrados en Mendoza, la relevancia de quienes tienen perfil mercado interno cae al 58% Vs un 42% de las que poseen perfil exportador. Si las clasificamos por tamaño, encontramos que una gran mayoría de estos establecimientos catalogados "con perfil exportador" son de tamaño pequeño (menos de 1 millón de litros), lo que ocurre en 216 casos (de los 239). Existen luego 20 en los rangos intermedios, y solo 3 de tamaño grande (más de 10 millones de litros).
Si consideramos el volumen que manejan estos establecimientos con perfil exportador, vemos que la balanza se vuelve a inclinar hacia el mercado interno, ya que la participación de las exportadoras baja al 32%. Dentro de estas, lógicamente las empresas "grandes" toman preponderancia, manejando el 72% del volumen de este grupo, mientras que las "pequeñas", que tenían la mayoría en cantidad de establecimientos, reducen su participación al 8%.
Las empresas con perfil mercado interno son aún mayoría en Mendoza, contabilizándose 329 en 2013. Si las clasificamos por tamaño, nuevamente encontramos una gran preponderancia de empresas "pequeñas", que llegan al 87% del total. En el otro extremo de tamaño, localizamos 15 empresas "grandes", mientras que en los tamaños intermedios se ubican 29.
Tal como mencionamos, la importancia en volumen del grupo mercado interno es mayor que en cantidad de actores. En 2013 ascendió a 68% del total, y su distribución por tamaño fue de 81% para las "grandes", 26% para las "medianas" y solo 5% para las "pequeñas".
Resto de las provincias
Para el resto de las provincias vitivinícolas analizadas el panorama es muy diferente, ya que toman absoluto protagonismo las empresas con perfil mercado interno, con la excepción de Neuquén, donde el bajo número de actores produce participaciones más equilibradas.
Salta, Catamarca y Río Negro son las provincias con un perfil mercado interno más marcado (más del 80% en cantidad de actores y más del 95% en volumen). San Juan, segunda provincia en tamaño del sector cuenta con un balance de 75% de empresas con perfil doméstico (correspondiente a 45 casos), que acumulan el 96% del volumen; y con 15 empresas con perfil exportador (25%), con el 4% del volumen. En el caso de La Rioja, nuevamente con un número muy bajo de participantes (8), 5 tienen perfil doméstico y 3 exportador.
Comparación histórica
Comparamos los resultados obtenidos en 2013 con los de 2005 y encontramos en la mayoría de las provincias una tendencia a la reducción de la participación de las empresas con perfil mercado interno a favor de las exportadoras. Este cambio se verifica en Mendoza, San Juan (donde más importante ha sido el cambio), La Rioja, Río Negro y Neuquén, mientras que el proceso inverso se registró en Salta y Catamarca.
Con respecto a la distribución por tamaño de empresa, no se observan diferencias de significancia entre los dos años analizados.
En los gráficos a continuación podemos ver en detalle la variación que se produjo en la distribución de empresas según tamaño para cada grupo:
Conclusión
El proceso de apertura del sector vitivinícola hacia mercados externos se verifica mediante la observación de la creciente importancia de las empresas con perfil exportador en el total. Esta realidad se registra a nivel global en el país, pero es en Mendoza donde se registra el corazón de la internacionalización del sector. Sin embargo, la importancia del mercado interno a pesar de perder en participación, no ha perdido en preponderancia, ya que sigue liderando con holgura el sector. Las empresas de tamaño pequeño son una gran mayoría, pero manejan volúmenes escasos. Las empresas medianas-pequeñas y medianas-grandes tienen bajas participaciones en cantidad de actores y en volumen, mientras que las grandes cuentan con muy baja cantidad de participantes, pero sus volúmenes son marcadamente mayoritarios.