Cómo se posiciona el vino frente a sus competidores (cerveza, espirituosas, sidras y mezclas listas para consumo). Las previsiones de Euromonitor International de cara a 2017. Las regiones que más crecen y la visión de la situación en la Argentina.
Mucho se ha hablado sobre la industria del vino y las tendencias en su consumo. En esta ocasión vamos a repasar las principales tendencias en el consumo de las bebidas que compiten con el vino por la preferencia del consumidor.
El vino es una bebida alcohólica de graduación intermedia. Las bebidas alcohólicas más consumidas en el mundo se encuentran en los dos extremos: la cerveza de muy bajo contenido alcohólico y las espirituosas de alta graduación.
Durante mucho tiempo se abonó la "teoría de la convergencia", que decía que el consumo de alcohol (en litros de alcohol puro lpa) tendía a converger en un punto medio, y de esto se beneficiaba el vino: los países consumidores de cerveza subían la graduación alcohólica de sus bebidas y los consumidores de espirituosas se inclinaban hacia bebidas de menor graduación.
Sin embargo, en el último tiempo se está registrando un resurgimiento de las bebidas espirituosas, de la mano del lanzamiento de nuevos productos.
Previsiones 2017
Según un informe publicado por Euromonitor International, el consumo de bebidas alcohólicas se incrementará en 15% hasta el año 2017, cuando alcance los 25,4 billones de litros, medidos en lpa
[1].
La principal región consumidora es Asia Pacífico que, además, se estima que crecerá al doble de velocidad que el promedio global.
La cerveza pierde terreno
En general, se estima que todas las categorías seguirán creciendo, pero serán las espirituosas y la sidra (de manzana y pera) las principales beneficiadas, mientras que la cerveza continuará siendo la gran perdedora.
Aun así, para 2017 la cerveza seguirá siendo la bebida alcohólica más popular en términos de lpa, seguido cada vez más de cerca por las espirituosas, mientras que el vino ocupará un aún distante tercer lugar; y mucho más abajo RTDs
[2] y HS en el cuarto
[3] puesto y sidras de manzana y pera el quinto lugar
[4].
El abandono del consumo de la cerveza es un fenómeno extendido por todo el mundo, con la excepción de Latinoamérica y Europa del Este. En estas regiones su consumo es relativamente "nuevo", por lo que aún se ve beneficiada por el reemplazo de bebidas "tradicionales" (en estos casos se trata principalmente de espirituosas).
Esta tendencia de abandonar productos tradicionales es la que impera en el mundo y es la principal responsable de la mala performance de la cerveza. En las regiones en las que el consumo de bebidas alcohólicas tiene características de madurez (Norteamérica, Europa Occidental, Australasia), la cerveza está siendo reemplazada principalmente por espirituosas, pero también cada vez más por sidra.
También dentro de cada categoría esta tendencia cambia el escenario: dentro del proceso global declinante de la cerveza, las artesanales ganan importancia, dentro de las espirituosas se reemplazan las tradicionales (como cachaça en Brasil o vodka en Rusia) por las internacionalmente reconocidas, principalmente whisky, y vodka en Latinoamérica.
El vino también se está beneficiando en estos mercados maduros, a excepción de la Europa Occidental (donde el consumo de vinos es en sí sumamente tradicional).
Retomando el caso de la cerveza en Latinoamérica, son llamativas las previsiones que dicen que en todos los países de esta región el consumo per cápita está en aumento, principalmente de la mano de marcas locales y de cerveza estándar (lager), y quienes están traccionando este aumento son las clases medias.
Por el otro lado, en Norteamérica el consumo de cerveza disminuye a medida que sus habitantes buscan productos de mayor valor agregado, prefiriendo cervezas artesanales o Premium.
En el caso del vino, en ambas regiones, el consumo per cápita crecerá 10% en el periodo 2012-2017.
La situación en Argentina
Según el análisis de Euromonitor International, las tendencias dominantes en el mercado de bebidas alcohólicas en nuestro país son las siguientes:
- La tasa de crecimiento del consumo de bebidas alcohólicas en la Argentina se desacelera gracias al efecto de la inflación.
- Se resiente el consumo ontrade (en restaurantes, bares, etc.), debido a una población cada vez más cauta con el gasto. Si bien esta categoría crece, lo hace a menor ritmo, ya que cada vez más gente prefiere reunirse y consumir bebidas alcohólicas en la casa.
- Las restricciones a las importaciones impuestas por el Estado ha hecho disminuir el consumo de bebidas internacionales como whisky, las cuáles en parte son reemplazadas por marcas locales.
- El canal off trade (supermercados, negocios, vinerías, etc.) domina ampliamente la venta de bebidas alcohólicas, ya que aproximadamente el 80% del volumen sale por aquí. Esta estructura se mantiene, levemente realzada por la creciente tendencia a reunirse en el hogar descripta anteriormente.
- Se espera un menor crecimiento en 2013 debido a la incertidumbre económica, el efecto de la inflación y a un consumidor que cada vez más escéptico sobre el corto plazo.
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Fuente: Euromonitor International (2013).[/caption]
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Fuente: Euromonitor International (2013).[/caption]
[1]Lpa: Liters of pure alcohol, litros de alcohol puro.
[2] RTD: Ready to drink, bebidas que se comercializan ya mezcladas y listas para su consumo.
[3]HS: High Strenght Premixes, son premezclas con un % de alcohol superior al 15% y combinado con jugos.
[4]Cider (manzana) y Perry (pera).