Por: Rodolfo Richard. En: Revista Estudios Socilaes N°45. Universidad Nacional del Litoral. Segundo semestre 2013.

En este artículo se presenta la situación de la economía vitivinícola de Mendoza que, al comienzo de la Primera Guerra Mundial cayó en una profunda depresión, para reactivarse desde 1919. La gran crisis tuvo un considerable impacto económico - enfrentado con medidas procíclicas - y social - que significó caída de salarios y empleo entre los sectores populares. Se creó una mal llamada Cooperativa Vitivinícola, que pasó a controlar todo el sector con la finalidad de equilibrar demanda y oferta, sin éxito. El triunfo de la Unión Cívica Radical en enero de 1918 y la asunción del gobernador José N. Lencinas, coincidió con la reactivación de la economía nacional. Un discurso y una legislación obrerista crearon condiciones, junto con la intervención del Estado en la economía, para que la vitivinicultura saliera de su crisis pero, simultáneamente, incentivaron la conflictividad social. Ambos fenómenos son mostrados: destrucción y regeneración de riqueza; y conflictos gremiales que involucraron, con suerte variada, al conjunto del movimiento obrero que buscaba mejores condiciones de trabajo y mejor distribución de la riqueza.